"La cueva del ejecutivo", es una metáfora que describe a aquellos ejecutivos que, a pesar de su habilidad e inteligencia, se quedan encerrados en su propio mundo, incapaces de comunicar su valor a los demás.
Son profesionales muy talentosos y con una gran capacidad analítica; sin embargo, carecen de habilidades sociales y de comunicación que les impide conectar muchas veces con los demás.
A pesar de su gran potencial, se quedan estancados en su carrera profesional y no son capaces de ascender a puestos de mayor responsabilidad, ni de crecer lateralmente en sus organizaciones.
Hay varias causas por las que un ejecutivo se refugia en su cueva.
1️⃣ Los programas de formación tradicionales se concentran normalmente en el desarrollo de las habilidades técnicas, dejando de lado las habilidades sociales y de comunicación.
2️⃣ Muchas organizaciones fomentan un ambiente competitivo, en el que los ejecutivos se concentran en su propio trabajo y en el de sus equipos, sin preocuparse por conectar con los demás.
Que un ejecutivo se mantenga en su cueva, tiene un impacto negativo tanto para el profesional, como para la organización donde trabaja.
Las organizaciones que funcionan como islas condicionan el talento disponible y la consecuencia es que se pierden ejecutivos con un gran potencial, limitando oportunidades de colaboración e innovación.Si sentís que estás en tu cueva profesional:
Aunque llueva. ☔️
Salí de tu cueva. 🚀